La feria

Otras vacaciones,¡es que a los sevillanos nos gusta las fiestas!tan cerca de la Semana Santa....

Hay personas que no le gusta y otras que sí,puede ser porque no saben bailar entre otros motivos,yo lo sé por experiencia,hace dos años o tres,no me gustaba la feria y me aburría,estar en las casetas era una pérdida de tiempo,estaba sentada mientras observaba con cierta envidia aquellas personas que sabían bailar y se divertían.También era que en mi clase sabían bailar la mayoría de las chicas.Y me deprimía,llegué a mentir que sabía bailar porque me daba vergüenza que se supiera.llegué a pensar que no podría aprender y que era demasiado tarde.Cuando en el colegio,en gimnasia teníamos que bailar, siempre protestaba y no me gustaba nada,a diferencia de mí,las otras estaban encantadas,les gustaba.no lo pude soportar más y me apunté a clases,estaba feliz,¡sabía bailar!pero..... luego me dí cuenta que no bailaba como las demás y otra vez me derrumbé,el primer año no bailé porque no bailaba como todo el mundo y me daba corte.El segundo bailé un día,pero seguía dándome vergüenza.Luego sé le expliqué a una profesora, que no sabía bailar como los demás,y me dijo que en la feria cada persona baila a su estilo,esas palabras me hicieron reflexionar,y me dí cuenta que no bailaba tan distinto como yo pensaba,eso,me llenó de felicidad y ya bailé todos los días,¡y no me daba vergüenza! ¡pero qué estupida fuí!yo sé bailar y ya está,por eso le doy las gracias.ahora,volvamos a lo actual,este año,la feria ha comenzado con lluvía que no cesaba ni de día ni de noche.el miércoles fuí a la feria,me dió pena ver que los farolillos estaban rotos como el año pasado,qué coraje debe dar a los que colocan los farolillos y van y se rompen.Ese día hacía frío,y llovió un poco,terminé cansada de tanto bailar y nos fuimos a casa a las cuatro de la madrugada.al llegar,caí rendida y con los pies hechos polvo,aunque a pesar de ello me lo pasé fenomenal,sé aprovechar los buenos momentos,no os puedo contar más,todavía no ha acabado la fiesta,espero que os diveirtaís.